Seian Hanashiro nació en la villa de Haneji, en el año 1930. Egresó de la Escuela de Agricultura de Kadena y se desempeñó en el área de la educación ejerciendo como maestro de una escuela primaria. En el año 1926 viaja a Brasil llamado por el Sr. Taminato quién ya estaba residiendo allí, y en el año 1928, Seian llama a su esposa.
Al principio trabajó como ayudante en las tareas de una granja y también como maestro de una escuela primaria. Posteriormente adquirió 120 hectáreas en Itariri dedicándose al cultivo de bananas, siendo el primero en lograr el éxito en esta área. Desde mediados del año 1934 va comprando progresivamente nuevos terrenos; va aumentado el número de empleados y ampliando también la producción de bananas y de arroz. Hasta poco antes de estallar la Segunda Guerra Mundial, había logrado ser un conocido hacendado del lugar, que contaba a su cargo con casi 600 miembros de 150 familias. Por otro lado también se mantenía muy ocupado con la administración de un bazar.
Según las investigaciones realizadas en el año 1989, los bienes que poseia Seian eran los siguientes: en primer lugar un terreno de 2,250 hectáreas, más otros 5 similares, 1 generador de electricidad, 1 tractor, 1 camión de carga etc. cuyo valor fue estimado en 40.000 contos (moneda brasilera en la época de la colonización)
En el año 1936 establece con algunos colegas, la Cooperativa de Productores de Bananas, en el año 1946 funda la companía de Exportación de Frutas Paulista S.C., y posteriormente en el año 1951 crea la Sociedad Comercial Hanashiro Shokai, siendo el representante de venta oficial de los motores Yanmar Diesel.
También se desempeñó como presidente de la Asociación Okinawense de Brasil, y ocupó cargos en varias agrupaciones oficiales.
En el año 1975, Seian fue reconocido por sus actividades en el área económico-social, obteniendo la condecoración "Kun goto zuihosho"de parte del gobierno japonés.
Con el escenario de la emigración a su espalda, Seian fue un personaje que dejó su nombre en la historia de la emigración por su firmeza de carácter, ya sea en su actuación como docente, como empresario o como líder social.

La personalidad de Seian queda demostrada en un episodio ocurrido durante la Guerra del Pacífico. A pesar de estar marcado como personaje peligroso, cuando se emitió la orden de deportación de los nikkeis (descendientes de japoneses) de Santos y de Juquiá, suplicó y protegió a muerte a casi 1.000 familias nikkeis de Itariri.
Seian fue conocido y respetado por tener opiniones claras y concisas repecto al fenómeno de la emigración y las posibilidades de futuro de su tierra natal Okinawa.